dilluns, 30 de juny del 2008

VIDA PARA LELAS


Joan Sardà nació en Sant Quirze de Vallès, Cataluña, el 7 de junio de 1915. Por entonces, muchos esperaron que su vida fuera cortísima, hecho que por obstinación lo ha llevado a la longevidad. Se cree que su familia pertenecía a la nobleza rusa, otros piensan que eran babilonios, y alguien poco serio evoca un cierto origen tibetano. Desde muy joven utilizó estos antecedentes culturales para centrar sus intereses en diversos campos: entomología, pornografía, aeromodelismo, vitivinicultura, etc. Es teólogo y filósofo, pero hasta ahora nadie ha visto sus diplomas; eso hizo suponer a Scotland Yard en 1982 que los mismos eran falsos. A pesar de todo, Margaret Thatcher confirmó que esta última interpretación era verdaderamente una calumnia de sus enemigos, tanto judíos como árabes, que denunció sin perder tiempo a las Naciones Unidas el mes siguiente al primer atentado sufrido por el sabio de parte de la mafia siciliana. Actualmente, es necesario destacar que se desconoce, por razones de seguridad, dónde se encuentra.
(Fuente: "Vidas paralelas", de Plutarco de Queronea, comparación entre Diego Maradona y Joan Sardà, Cap. XXIV)

diumenge, 29 de juny del 2008

KEINE HÄLFTE DER WELT KANN ONHE DIE ANDERE ÜBERLEBEN


ACOSTUMBRANDOME A HABITARTE
Déjame vivir
en tu primer respiro
del gozo primero
de cada encuentro nuestro.
Deja que permanezca
en el gemido breve
que sigue al comienzo
de la recorrida
por el laberinto encantado
de tu sexo.
Dame posada
donde pueda quedar
dormido y seguro
asido al murmullo
fresco y ahogado,
como brotado
de las gargantas
audaces,
deliciosas,
de las ninfas libres
del bosque latino,
bendito de lluvias
y por las pasiones
tormentosas y francas
de un dios libertino.
Regálame albergue
en la tibieza
de esa media palabra,
de ese medio gemido,
de gozo que susurras
cuando embisto
la flor de tu vientre.
Y déjame habitarla,
habitarlo,
habitarte,
como si fuera en ti
el huésped más querido.
(G. y O.)

ACOSTUMANT-ME A HABITAR-TE
Dóna'm posada
on em pugui quedar
adormit i segur
apressat pel murmuri
fresc i ofegat
com brollat
de les goles
audaces,
delicioses,
de les nimfes lliures
del bosc llatí,
beneït de pluges
turmentoses i franques
d'un deu llibertí.
Regala'm alberg
en la tebiesa
de la mitja paraula
del plany inacabat
de goig que xiuxiueges
quan envesteixo
la flor del teu ventre.
I deixa'm habitar-la,
habitar-lo,
habitar-te,
com si fóra en tu
l'hoste més desitjat.
(O. i G.)

dissabte, 28 de juny del 2008

POR UN PUÑAO DE TIERRA

Violeta Parra Sandoval (Chile, San Carlos, VII región 1917- Santiago,1967)

Mi vida, los pueblos americanos
Mi vida, se sienten acongojados
Mi vida, porque los gobernadores
Mi vida, los tienen tan separados
¿Cuándo será ese cuando, Sr. Fiscal,
que la América sea sólo un pilar?
¿Cuándo será ese cuando, Sr. Fiscal?
Sólo un pilar, ay sí,
Y una bandera
Que se acaben los gritos en la frontera
Por un puñao de tierra
No quiero guerra

dijous, 26 de juny del 2008

CATALUÑA APUESTA POR EL NACIMIENTO DE NIÑOS MUDOS/CATALUNYA APOSTA PEL NAIXIMENT DE NENS MUTS


¿Por qué razones puede ser generada una medida compulsiva por el Estado? En una organización de raíz humanista y liberal, antes de llegar al fondo de ese asunto, hay una cuestión formal que aclarar: las compulsiones, sean positivas o negativas, son para la política de tradición prohumanitaria islas en el mar del continuo de las decisiones individuales, y esto quiere decir que sólo se actúa excepcionalmente desde el Poder en defecto de la iniciativa particular y también, es obvio, al darse la circunstancia de decisiones particulares nocivas para el conjunto pero sólo en interés de la dignidad de los sujetos, que no pueden resumirse en una masa indeterminada y abstracta y terminar siendo víctimas de una planificación que los arrasa en la realidad cotidiana, incluso a pesar de las buenas intenciones. Ya se sabe de qué material está pavimentado el camino del infierno…

Desde este punto de vista, parece acertado lo inscrito en el “Manifiesto por la lengua común”, en cuanto reza: “2. Son los ciudadanos quienes tienen derechos lingüísticos, no los territorios ni mucho menos las lenguas mismas. O sea: los ciudadanos que hablan cualquiera de las lenguas cooficiales tienen derecho a recibir educación y ser atendidos por la administración en ella, pero las lenguas no tienen el derecho de conseguir coactivamente hablantes ni a imponerse como prioritarias en educación, información, rotulación, instituciones, etc... en detrimento del castellano (y mucho menos se puede llamar a semejante atropello «normalización lingüística»)”. Hallo que relacionado con este punto hay otro que he podido advertir a través de mi propia experiencia como observación valedera: “3. En las comunidades bilingües es un deseo encomiable aspirar a que todos los ciudadanos lleguen a conocer bien la lengua cooficial, junto a la obligación de conocer la común del país (que también es la común dentro de esa comunidad, no lo olvidemos). Pero tal aspiración puede ser solamente estimulada, no impuesta. Es lógico suponer que siempre habrá muchos ciudadanos que prefieran desarrollar su vida cotidiana y profesional en castellano, conociendo sólo de la lengua autonómica lo suficiente para convivir cortésmente con los demás y disfrutar en lo posible de las manifestaciones culturales en ella. Que ciertas autoridades autonómicas anhelen como ideal lograr un máximo techo competencial bilingüe no justifica decretar la lengua autonómica como vehículo exclusivo ni primordial de educación o de relaciones con la Administración pública. Conviene recordar que este tipo de imposiciones abusivas daña especialmente las posibilidades laborales o sociales de los más desfavorecidos, recortando sus alternativas y su movilidad.”

Voy al repaso y coordinación de los temas y la introducción arriba mencionados. Personalmente, llegué al idioma catalán por… amor. Por amor sentimental a una mujer, mi novia catalana, y por amor ciertamente a los idiomas como vocación intelectual. Soy de los que como dijo un buen amigo madrileño con quien mantengo contacto electrónico piensan que “tener más de una lengua es tener más de un alma”, por lo que al igual que lo afirmado por mi compatriota Hernán Scacieri en oportuno artículo publicado ya hace tiempo, digital y creo que físicamente en papel ahora, no puedo concebir que no se admita que poseer dos lenguas y dominarlas es un tesoro, y que debería aspirarse como meta ideal a tener miles de lenguas, por usar quizá la metáfora excesiva.

Lo que el “Manifiesto…” puntualiza en relación al disfavor e introducción de reglas de comportamiento obligatorias distorsivas para el trabajo de cualquier clase, y también el intelectual, desde ya,lo he escuchado como anécdota creíble y vivido directamente en carne propia.

En lo que me atañe, para comenzar por la vicisitud de la que puedo dar fe por mí mismo, he tenido una rara idea -parece-: traducir textos de Jorge Luis Borges al catalán, aprovechando varios azares coincidentes: la perspicacia intelectual de mi novia y sus condiciones de buena lectora y su calidad de catalana bilingüe diestra en ambos idiomas, y mi modesta dedicación de exégeta de los textos del autor argentino, cuyo castellano, por serme muy regionalmente materno, puedo explicar con mayor amplitud que otros castellanoparlantes agregando un punto de vista distintivo. Como se ve, no es un plan escolar con exactitud, mas una dedicada labor de amor y conocimiento. No es un forzamiento de ninguna voluntad con el designio de aprender, sino amor entre nosotros y amor a la literatura y al intercambio cultural el que nos guió.

No soy porteño sino entrerriano, lo que dado el castellano usado por Borges tiene a veces hasta ventajas, ya que al ser casi vecino “visual” de la Rca. Oriental del Uruguay (puedo divisar uno de los brazos del río limítrofe desde mi apartamento), manejo con solvencia modismos de ese país que Borges usaba a menudo por varios motivos que los conocedores sabrán y que en este momento no son el tema central de esta nota.

Tropezamos en ese camino de repente con algunas cosas muy extrañas, que paso a consignar y que me llevan a pensar que el “Manifiesto…” se refiere a abusos reales originados en la “Normalización…”: hemos tratado de “penetrar” humildemente, ofreciendo el trabajo, que creemos, sin meritar su valor final, es digno de tener en cuenta -sobre todo a mi juicio pueden interesar mucho las apostillas sobre la conceptuación de vocablos y su exacta traducción- en los círculos de organizaciones catalanas subvencionadas por la Generalitat o sus organismos satélites asociados para, simplemente, difundir la obrilla (tres textos cortos*) y someterla sin ningún reparo de prevalencia sobre nada ni nadie al interés de los profesores de catalán en Argentina, y especialmente a los de su capital política y administrativa. En este punto, la rareza se acrecienta, puesto que Buenos Aires es una de las ciudades de habla hispana más importantes del mundo y, a la vez, un foco importantísimo, como todo indica según cifras, publicidad, etc., de propulsión de la cultura catalana. En ese sentido, sólo hemos obtenido silencio o respuestas que, jugando con las palabras, de tan cortas carecen de verdadera cortesía…, por decir lo menos. ¿Por qué en una ciudad de ese calibre, donde supuestamente existe una radicación extrapeninsular de sueldos y medios y conocimiento catalanes tan profusa nadie presta atención a un ofrecimiento sin más intención que la oferta cultural fundada sobre el amor al catalán y al castellano escrito por un escritor nativo de Argentina y universal simultáneamente, que para muchos fue un Nobel no entregado? Misterio.

La segunda alternativa de nuestra aventura no deja de ser también rarísima. En búsqueda no tanto de editoriales ávidas sino más bien de patrocinadores curiosos (que no hallaba entre los natos “catalanes difusores oficiales”...) y ciertamente de una corrección totalmente sumisa hacia quienes detentan un conocimiento profundo de la lengua catalana que podría encontrar posiblemente a través de ella, dirigí las presentaciones y solicitudes correspondientes a la Fundación “Jorge Luis Borges”. Esta Fundación, por medio de un correo digital firmado por una atenta dama, supongo que argentina, y desde Buenos Aires, me hizo llegar una respuesta amabilísima pero inquietante, que resumo, en cuanto al pedido de examen de nuestra labor: en esta última ciudad no había personas competentes para tal tarea.

Es quizá odioso realizar un paralelismo entre la crítica que el liberalismo económico, con quien no me hallo estrictamente identificado, hace en lo que se relaciona a su mirada sobre los controles de la actividad económica y la correlación de proliferación de las burocracias obstrucionistas, por un lado, y el manejo burocrático y “normalizador” del catalán que hoy rige en Cataluña, por el otro. Sin embargo, no otra cosa podría estar ocurriendo, ya que es bastante conocido que se está promoviendo la difusión de la enseñanza del idioma catalán en el extranjero, y también en la Argentina. Si uno parte de la base de que esa enseñanza es una ramificación secundaria de un verdadero aliento promotor del idioma catalán y del amor por él nacido de la admiración y el afecto y no un mero afán de regularización dictatorial, no se arriba a comprender cuál es el motivo por el cual Buenos Aires carece de gente calificada para llevar a cabo la evaluación de una humilde obra artística en idioma catalán (me refiero, aclaro, a nuestra traducción y no a los textos originales).

Sin realizar ninguna acusación infamante, debo sinceramente hacer constar ciertos hechos, con alguna salvedad a la que nobleza obliga: una intelectual barcelonesa de pura cepa, de los mejores quilates humanos y la mayor predisposición cultural tuvo el empeño de mediar por pura amistad y simpatía, tal como es propio de los nativos de esa hermosa y cálida Ciudad Condal, entre nuestra inquietud y los directivos del Institut Ramon Llull, a fin de comenzar una serie de intercambios para la cooperación y fortalecimiento del entendimiento entre Cataluña y nuestro medio universitario. De nuevo nuestra inquietud estaba respaldada por las traducciones, por documentación oficial referenciada adecuadamente, que se podía rastrear sin dificultad, y también lo estaban los antecedentes de quien suscribe, pues he publicado artículos en una prestigiosa revista de filosofía española, que seguro es de las más valiosas de Europa por la altura de sus codirectores y los que en ella escriben, haciendo abstracción del redactor de estas líneas. A pesar de esos buenos oficios, por los que estaré eternamente agradecido y por los cuales no tengo ninguna queja que exponer, todavía aguardo aunque sea una sola palabra del Institut..., el que, como se diría castizamente, ha dado por toda respuesta la callada.

Last but not least, he tenido noticias concretas de una situación bastante absurda propinada por la política de Normalización…, y que se condice con el diagnóstico del “Manifiesto por la lengua común”: los propios catalanes nativos, y aun la lingüista, como se llama en España a la gente académicamente entendida en estos asuntos, que se dignó cooperar con nuestra obra agregando observaciones importantes, deben someterse a un examen de pago, bastante caro y para algunos catalanes de a pie inaccesible, me comentan, a fin de demostrar su catalanidad idiomática de nivel "D" y para detentar determinados cargos, o funciones. Ello es, a mi criterio, bastante vejatorio, porque si se reconoce el atropello del franquismo en aras de la supresión de la lengua, y ello es absolutamente abominable, nos encontramos ahora como dice el Manifiesto… con una “Lengua” con mayúsculas que ha adquirido vida, y ya no tiene sentido como servidora de la comunicación entre los seres humanos y las culturas siendo antes una “Entidad” casi sobrenatural que los somete al extremo ridículo de señalar por medio de un examen estatal quiénes de los nacidos en Cataluña y que hablan catalán desde la cuna son realmente… catalanes, que de eso se trata, según se percibe fenoménicamente.

Los efectos reales y malignos de esta errada política normalizadora no son teóricos: en un medio en el que la inmigración es una cuestión volátil y de explosivo tratamiento, y donde cualquier elemento dispuesto de modo equivocado puede engendrar odios, se observa que los catalanes nativos de escasos recursos que deben pagarse su examen para ser convalidados como catalanes “auténticos” comienzan a dirigir su resentimiento contra los no nacidos en Cataluña que pueden obtener una subvención para su mejor integración a la cultura catalana, lo que no es un resultado que puede producirse en teoría; al contrario, ya está sucediendo con mella precisamente de la verdadera integración. Si los defensores de la Normalización… acusan a los autores del “Manifiesto…” de reminiscencias autoritarias por mostrarse ocultamente como de izquierdas o derechas (¿?) despóticas conforme al articulista que quepa, sea Pilar Rahola u otro intérprete análiticamente antagónico pero convergentemente “catalanizador” y monolingüístico, deberían interrogarse asimismo acerca de qué tipo de conducta están induciendo desde el Estado autonómico en la gente común, léanse concretos impulsos agresivos completamente negativos.

Esta polémica con ingredientes fundamentalistas recuerda la relativa a la vexata quaestio zarandeada en Israel en torno a la “hebraidad” política, que divide a laicos y religiosos judíos. La pregunta de fondo es sin duda (o con demasiadas dudas…) cómo se distingue a un verdadero judío entre otras personas. Un escritor judío pronunció una sapientísima frase que quizá Maimónides hubiera homologado: “Un verdadero judío es aquél que nunca formularía tal pregunta”. Creo, atrevidamente, que mi compatriota Daniel Baremboim coincidiría. Y creo, con sinceridad, que un verdadero catalán debe ser el que llega al amor por Cataluña sin ser encadenado a su lengua con ese objetivo, y por el sencillo respeto a ella y por su belleza y sus tradiciones, y su importancia como valor de intercambio semántico internacional para mejorar el Mundo, que son todas éstas “cadenas” suficientes para atarse humanamente a una devoción por algo.

Debo decir también, con todo respeto por los amigos castellanos ibéricos de excelente prosapia intelectual, que la poca importancia que la Cataluña oficial ha dado a las traducciones no escolarizadas de Jorge Luis Borges de parte de este argentino al catalán son más contradictorias en cuanto sostengo que la Castilla peninsular no ha terminado de entender adecuada y cabalmente el idioma argentino de aquel escritor, y dado que los catalanes habitualmente toman las obras escritas en castellano para su acervo sin traducirlas y las aceptan además con el tinte de sus comentadores castellanos, mi intención más clara fue hacer abrevar a Castilla a través de Cataluña en las textos de Borges. Advierto que los amigos de la Generalitat y sus asociados culturales e idiomáticos no me han comprendido, o no se permiten, tal vez, comprenderme. Podemos achacarlo a mi insignificancia. Es una explicación. Y asunto concluido. Mi vanidad herida, y el Estado catalán indemne. A nadie importante alarmará eso.

Gustavo F. Soppelsa

* Los textos traducidos hasta ahora son “La casa d’Asterió”, “Borges i jo” y “Funes el memoriós”, disponibles para quienes sientan curiosidad por ellos.

dimarts, 24 de juny del 2008

PERDONALO, SRA., NO SABE LO QUE HACE


Un sujeto dado a ejercer la "literatura suntuosa" acaba de denigrar a
Eva Perón
(http://www.perfil.com/contenidos/2008/06/23/noticia_0020.html), incurriendo en una costumbre de larga data practicada por muchos.
Este tal Enrique Serna reside en Barcelona, sitio que, creo advertir, le permite mexicanamente (con el máximo respeto que me merecen todos sus compatriotas) hablar como sabio contraoráculo de “los cinturones de miseria de Argentina” -sic-, y ello exactamente entre los años 1946 y 1952, breve y ajustado período durante el cual la vida de la mujer a la que alude tuvo la relevancia que él analiza y profetiza con retrovidencia.
Dice este artículo, que ha roto el equilibrio ecológico de mi ordenador, que el mencionado lúgubre habitante de los "giros negros" de las editoriales de algún sitio de la España, nacido siete años después de la muerte de la injuriada, reconoce, a guisa de fruto inmaduro vomitado por el Paricutín, que desde hace poco en México -y flaco favor le hace a los mexicanos serios de todas las eras- “cualquiera puede opinar sobre cualquier tema” (sic). Ciertamente. Si es lo que ha querido probar, touché.
En la época precisa en que Eva Perón andaba el Río de la Plata, otro escritor, un colombiano juvenilmente genial, un muchachito llamado Gabriel García Márquez, conforme sus “Textos costeños”, usó como periodista de las mismas licencias, y habló, con más elegancia, opinando también respecto de lo que no sabía, de la segunda esposa del Gral. Perón. A su favor y disimulando su error, contaban su inmadurez, su buena prosa, su iconoclasia, la temporaneidad agitada y algo pueril de alguien que fermentaba su mejor obra por venir en una columna redactada a las apuradas.
Pero esta otra clase de material escribiente transportado hasta Cataluña desde México por una línea aérea excesivamente benévola y contraria a los intereses artísticos del Viejo Continente -agregaría yo de mi propia cosecha- debería ser librado al fiscal que fuera el peor fiscal que literariamente pudo tener Eva Perón; para acusarlo, debería usarse una paráfrasis del comienzo del cuento “El muerto”, de Jorges Luis Borges, a saber: “Que un hombre del suburbio de la ciudad de Tijuana, que un triste y desalado mariachi sin más virtud que la infatuación que otorga la calumnia ritual propinada a Hernán Cortés, se interne en los refinados pasillos de las casas de edición de la culta Europa y llegue a ser un sujeto publicadamente famoso, parece de antemano imposible. A quienes lo entienden así, quiero contarles el destino de Enrique Serna, de quien acaso no perdura un recuerdo en la Plaza de las Tres Culturas y que murió estéticamente en su ley, merced al olvido que muerde lo insustancial, en los confines del Barrio Chino”. Si la situación mereciese igual atención, cosa que con reciedumbre afirmo que no ocurre, y si yo fuese Umberto Eco, circunstancia totalmente alejada de la realidad de mi escasísimo talento, pudiera descerrajar yo respecto del confeso "opinador mexicano de cualquier tema" lo mismo que el italiano sentenció cuando fue convocado a discutir con el autor de “El Código Da Vinci”: “Avisadme cuando tengáis un escritor para debatir”.

diumenge, 22 de juny del 2008

PROYECTO CORBACHO: LOS VIEJOS COMO BASURA



En su libro “Las palabras y las cosas, Michel Foucault partió de la disparatada clasificación inventada por Jorge Luis Borges, quien a la vez la remite a una apócrifa enciclopedia china. Dice J. L. B.: “En sus remotas páginas está escrito que los animales se dividen en a) pertenecientes al Emperador, b) embalsamados, c) amaestrados, d) lechones, e) sirenas, f) fabulosos, g) perros sueltos, h) incluidos en esta clasificación, i) que se agitan como locos, j) innumerables, k) dibujados con un pincel finísimo de pelo de camello, l) etcétera), m) que acaban de romper el jarrón, n) que de lejos parecen moscas.”
Pues el inefable Celestino Trotaconventos Corbacho ha confirmado la sagacidad creativa del escritor argentino y dado aliento práctico a la "teoría de la taxonomía interesada" propalada por el francés.
Por este buen Celestino, venimos a enterarnos que, en el colmo del éxtasis de “lo políticamente correcto”, debemos adoptar una taxonomía que nos pone realmente a volar ante una nueva especie: ahora los viejos son, adecuadamente, “población pasiva” dentro de la “Enciclopedia Corbacho”.
Todavía hay un detalle más…chocante, y no sé si encuentro la palabra justa al pronunciar “chocante”: este raro animal macho de la especie Celestinarium emigrans, el tal Celestino, acaba de enunciar que la prohibición de la importación de viejos infieles y sudacas a tierras cristianas se hace bajo una consigna humanitaria que reconozco arranca lágrimas hasta el más cruel de los bucaneros del Caribe. Poneos de pie, ciudadanos de la República, si España lo fuera como alguna buena gente lo quiso en algunos tiempos hoy enterrados: los viejos no españoles serán detenidos en los límites circunspectos de la Iberia para… no causar stress -sic- a su descendencia (que no debe distraerse de producir para Iberia, se entiende).
Por fin, por fin… Las oscuras presiones de las suegras, las reconvenciones de las madres, los padres regañones son una cuestión de Estado. Por fin. Por fin ese perezoso Estado liberal, hoy conducido por el celeste Celestino, que creo será de izquierdas, mete mano en las disputas que perturban la cena de las familias, y enlentecen el crecimiento del Producto Bruto Interno.
Tanta dedicación planificadora alegra: esperamos que pronto Celestino, haciendo honor a su nombre, promueva románticamente la deportación de mujeres (españolas o no) que nos causen stress cuando no quieren hacer el amor porque les duele la cabeza, porque eso incidirá sin duda en el rendimiento laboral masculino el día después. Eso se llama poner fin al “Estado ausente”, porque si eso no es presencia…¿qué otra cosa puede serlo?
Las malas lenguas dejan oír una rumor sobre verdaderas intenciones, un poco más perturbadoras: aseguran que el Estado español quiere aumentar las horas de la jornada laboral que se exigen a los recién llegados que pueden trabajar, y dejar en la inanición improductiva, donde cayeren, sea Zaire, Marruecos, Perú o Argentina, a los viejos extranjeros que no sirven como pilares de este Reino de delicias coronado por un Borbón. Alguien me contó alguna vez de selecciones análogas llevadas a cabo en los vagones que conducían a los campos de concentración. Sin duda, las ideologías han muerto, y sólo restan los hijos de puta descarados vestidos de azul pastel antes que de verde o gris nazi. Todos igualmente vestidos de azul pastel, sin distinciones, en los comités de todos los partidos... sin distinciones.


dissabte, 21 de juny del 2008

PROJECTE CORBACHO: ELS VELLS COM A ESCOMBRARIES




En el seu llibre “Les paraules i les coses”, Michel Foucault va partir de l'absurda classificació inventada per Jorge Luis Borges, qui l’ha presa d’una apòcrifa enciclopèdia xinesa. J. L. B. diu: “En les seves remotes pàgines està escrit que els animals es divideixen en a) pertanyents a l'Emperador, b) embalsamats, c) ensinistrats, d) garrins, i) sirenes, f) fabulosos, g) gossos solts, h) inclosos en aquesta classificació, i) que s'agiten com a bojos, j) innombrables, k) dibuixats amb un pinzell molt prim de pèl de camell, l) etcètera), m) que acaben de trencar el gerro, n) que des de lluny semblen mosques.”
L’inefable Celestino “Alcavot” Corbacho ha confirmat, doncs, la sagacitat creativa de l'escriptor argentí i donat alè pràctic a la “teoria de la taxonomia interessada” propalada pel francès.

Il·luminats per aquest bon Celestino venim a assabentar-nos que, en el súmmum de l'èxtasi del “políticament correcte”, hem d'adoptar una taxonomia que ens fa al•lucinar davant una nova espècie: ara, els vells són, adequadament, “població passiva” dintre de l'Enciclopèdia “Corbacho”.

Encara hi ha un detall… odiós, i no sé si trobo la paraula justa al pronunciar “odiós”: aquest rar animal mascle de l'espècie Celestinarium emigrans, el tal Celestino, acaba d'enunciar que la prohibició de la importació de vells infidels i sudaques vers les terres cristianes es fa sota una consigna humanitària que, reconec, arrenca llàgrimes fins i tot al més cruel dels bucaners del Carib. Poseu-vos dempeus, ciutadans de la República, dit allò com a si Espanya fóra ho que la bona gente va voler en alguns temps avui enterrats: els vells no espanyols seran detinguts als límits parcs de la Ibèria per a… no causar stress -sic- a llur descendència (la qual no ha de distreure's mentre produïx per a Ibèria, s'entén).
Per fi, per fi! Les fosques reprensions de les sogres, aquesta mare intractable i aquell pare reganyós són tots junts una qüestió d'Estat! Per fi! Per fi aquest mandrós Estat liberal, ara conduït pel celeste Celestino, que jo crec haurà d'ésser d'esquerres, va posar mans a l’obra per a calmar les disputes que pertorben el sopar de les famílies, i fent massa lent el creixement del Producte Brut Intern.
Tanta dedicació planificadora ens alegra. Esperem que aviat Celestino, fent honor al seu nom, promogui romànticament la deportació de dones (espanyoles o no) que ens causin stress quan no volen fer l'amor perquè els dol el cap: sens dubte, el rendiment laboral masculí podria ésser feble l’endemà. Això, Sr. Corbacho, és combatre l'Estat “absent”, perquè, si allò no és una sàvia presència de la llei reglant la vida social, quina altra cosa pot ésser-lo?
Les dolentes llengües deixen escoltar una brama sobre les veritables intencions, un poc més pertorbadores del Sr. Corbacho: asseguren que l'Estat espanyol vol augmentar les hores de la jornada laboral que s'exigeixen als nouvinguts quan ells poden treballar, i deixar en la inanició improductiva, caiguessin on caiguessin com a escombraries, sigui a Zaire, a El Marroc, al Perú o a l'Argentina, als estrangers vells que no serveixen com pilars d'aquest Regne de delícies coronat per un Borbó.
Algú va contar-me sobre seleccions anàlogues portades a terme als vagons que duien als desgraciats cap als camps de concentració durant la Segona Guerra Mundial.
És cert: les ideologies han mort, i només resten els fills de puta descarats vestits de blau pastís més que de verd o gris nazi. Tota una “nomenklatura” amb jaquetes blaves pastís, mimetitzats, als comitès de tots els partits… també, ells mateixos a llur vegada, mimetitzats.

divendres, 20 de juny del 2008

De comèdia, famílies i horrors: els Kirchner i els Adams


Les peripècies de l'Argentina imiten a l'art i reivindiquen la sàtira sinuosa d’Oscar Wilde: com a una sorprenent escalada en la qual algú segueix, al peu de la lletra, un manual per a autodestruir-se, els Kirchner sumen punts amb el rar objectiu que els hi declari invictes en un joc que bé podria anomenar-se Aniquili's de la manera més eficaç i amb la major estridència possible.
Mitjançant una cadena de provocacions, des de fa 100 dies han transformat modestes assemblees rurals en una rebel·lió universal. Cada intervenció de la presidenta és una una càrrega de llenya resseca que ella en deixa caure bé amatent sobre un incendi, cada hipotètica defensa de les mesures oficials de part de brètols a sou, com a D’Elia, que la gent detesta, apareix com a una llançada addicional en el costat d'una societat crucificada per llurs atropellaments. Els analistes miren això amb els ulls oberts de bat a bat: mai no s'ha vist un suïcidi tan clarament premeditat al llarg de la història argentina. Ja en el súmmum de la pulsió auto-deletéria, s'ha confiat al Congrés la ratificació dels errors, amb un explícit missatge olímpic: l'error ha d’ésser ratificat. D’aquesta mena, la suposada “discussió parlamentària” només serà l'exhibició desvergonyida de les exigències de submissió incondicional dels Kirchner, ara dirigida al Congrés. No és la correcció de l'error el que es busca; menys el debat relacionat amb la fal·libilitat o no del matrimoni presidencial: el Congrés té l'única i horrífica missió, sota amenaça, de declarar per llei la infal·libilitat d'aquesta família Adams sud-americà i poc risible.

dijous, 19 de juny del 2008

Mals escriptors


Els estats d’ànim que s'assemblen a la felicitat expel·leixen literatura barata. Quan algú està exultant, les paraules passen a un segon pla: el verbal es fa postergable, la narració lleugera i els adjectius vulgars. La felicitat és, aleshores, mala companya perquè l'art ha nascut per a ensenyar a destruir la infelicitat i, mancada de propòsit, no hi ha labor valuosa allí on els artistas es bressolen dins la placidesa. Els comentaristes de la felicitat són, gairebé per definició, mals escriptors.

dilluns, 16 de juny del 2008

LES CASSOLES FERIDORES I EL GOVERN CONJUGAL ARGENTÍ




Certament, totes les metàfores ensopeguen amb problemes a l'hora de delinear a Cristina Fernández de Kirchner (o tot just al “matrimoni presidencial”, com se sol anomenar aquí a l’Argentina a la unió conjugal i política que subsisteix amb el seu espòs, el ex mandatari Néstor Kirchner).

Jugant, de totes maneres, amb les paraules, podria dir-se que el duo està escalant la pedagogia del “divideix i regnaràs” al inrevés: lentament, amb rares passes gairebé de comèdia, o de tragicomedia, ha anat unint sistemàticament a tots els seus enemics, encara que a l'observador li sembli estrany veure parats enfront de Fernández de Kirchner a subjectes que durant moltíssim temps es van mantenir, o haurien hagut de manternir-se en llocs ideològics distants entre si.

No és mentida, en les seves arrels, l'acusació que contra el més llegendari col·lectiu agrícola i ramader, la Societat Rural, els “kirchneristas” enarboren: els latifundistas que en ella es congreguen van tenir tracte directe o indirecte amb gairebé tots els règims militars que va sofrir el país, a l’extrem que sovint s'ha dit esquemàticament que aquestes dictadures van ésser instaurades per a l'exclusiu beneplàcit (econòmicament interessat) d'aquella Societat…

Però, des de ja, el que s’enten avui pel “camp” a l’Argentina, enmig del conflicte que amb ell mantenen la presidenta i el seu marit coregnant, excedeix fomall i institucionalment a la Societat Rural. En aquest sentit, s'ha assegurat amb raó que la protesta no té precedents, perquè entre les quatre entitats agropecuàries que, unides, borden furiosament a Fernández de Kirchner almenys una de les tres restants es troba situada a les antípodes del model ideològic de la vella oligarquia bovina.

Això no és el més alarmant per al govern, el qual no ha fet precisament gal·la de coherència en el terreny de les idees polítiques, usant i descartant a dretes i esquerres d’acord al que li fos utilitzable. Per aquest motiu, els Kirchner mal podrien estar atònits davant una estratègia en la qual es complauen: transvasar, amb la major immoralitat, fórmules i personatges filosoficament antagònics aprofitant les hemorràgies de tots els partits per a alimentar l'estructura oficial de gent tan sols famolenca dels salaris pagats per l'Estat..

El que apareix com més perillós per a la supervivència d'aquest Estat matrimonial armat sorprenentment a l'Argentina el darrer any (tota comparança amb Perón i Eva Perón és massa simple de fer o un pecat per defecte, segons es miri…) és la grandària material aconseguida per la protesta: el conflicte va començar amb qüestionaments a la política agropecuària i ha acabat éssent un enjudiciament global portat a terme per tota la població, i principalment també la urbana, un examen realitzat a tota la gestió per tothom. En aquest judici, si uséssim la metàfora del jurat que delibera, cada dia que transcorre sembla una ràpida “conversa” multitudinària encaminant-se amb decisió vers la condemna, que així mateix té aspecte d’ésser unànime.

Dues circumstàncies incrementen la debilitat de Fernández de Kirchner: primer, l'oposició, enfilada al malcontentament del camp, repeteix amb plé accent de veritat coses que tothom coneix en contrast amb les tèrboles fàbriques de enganys que el govern va engegar des de fa molt temps, fins i tot en “la seva primera versió” on l'avui “marit presidencial” era titular formal de l'executiu; segon, no hi ha dubte que la devaluació de la moneda va provocar un brusc enriquiment del sector agropecuari, i allò va transformar-lo en un potent actor polític, amb recursos econòmics suficients per a lluitar a fi de trobar un indret adequat al seu paper productiu i financer determinant.

Aquest panorama desolador per a la cúpula kirchnerista sembla difícil de modificar. El rar, davant de propis i estranys -llegeixi's argentins i observadors estrangers al mateix temps- és que aquesta incapacitat de mutar, de restaurar o de fer renéixer la iniciativa política no sorgeix de condicions objectives, sinó d'una forma exòtica d'exercir el govern, d'un dèficit subjectiu, ara, de la pròpia parella presidencial. L'Argentina, per successives erosions dels partits destinats a proveir de funcionaris a l'Estat, ha patit notòriament una involució en els últims anys, esdevenint una nació on els ciutadans passegen amb prou feines com orfes de pares els quals s'han transformat en saquejadors de l'erari tenint en compte tan sols el benefici personal i l'adhesió compulsiva al nepotisme, entre altres vicis. Així mirat, el país projecta una ombra tenebrosa que s'assembla en els seus perfils més a un vaixell portant un timoner desertor i un capità absent que a una nau dins la qual -com en tota societat normalitzada- els oficials de bord naveguin amb les cartes sobre la taula i on el passatger indefens es trobi sota la protecció adequada de llur previsió, llur tutela i llur planificació.

*Per Pau Ferran Rius des de Concepción del Uruguay, Argentina